Trece dudas existenciales

Que me han llegado un porroncillo de dudas existenciales al correo, y uno que es generoso, las comparte con aquellos que tienen un ratillo que dedicar al blog. Ahí van, por lo menos las mejores.

1. ¿Por qué el pan de molde es cuadrado, si el choped, el salami, la mortadela… son redondos? ¿Quién tiene la culpa de esto, los tranchetes?
2. ¿Por qué cuando yo compré el piso no me dieron la canica que tienen los demás vecinos (pero todos) y que se les cae o la echan a rodar a partir de las doce de la noche?
3. ¿Por qué si nunca usamos las páginas amarillas, cuando las ves en el portal te pones contentísimo y, de hecho, piensas en cogerlas todas?
4. ¿Por qué cuando nos sonamos los mocos abrimos el pañuelo y miramos lo que hemos echado? ¿Qué esperamos encontrar? ¿Berberechos?
5. ¿Por qué cuando nos cuelgan el teléfono nos quedamos mirándolo como si el teléfono tuviera la culpa?
6. ¿Por qué en las pelis de miedo siempre aparece una puerta cerradas de la que sale mucha luz por las rendijas? ¿Qué están haciendo los espíritus, fotocopias?
7. ¿Por qué abrimos la boca cada vez que miramos al techo?
8. ¿Por qué nos da por ir a la nevera cada cuarto de hora si siempre hay lo mismo?
9. ¿Por qué cuando nos llaman al móvil sentimos la necesidad irrefrenable de ponernos a andar de un lado a otro?
10. ¿Por qué cuando estamos en un lugar alto nos obsesionamos con ver nuestra casa? “Mira, mira ahí, al lado del edificio rojo…"
11. ¿Por qué cuando echamos una carta al buzón no podemos evitar mirar por la ranura e investigar qué hay dentro? ¿Qué esperamos encontrar? ¿un cartero enano?
12. ¿Por qué cuando alguien se va a poner gotitas en los ojos abre la boca de esa manera tan extraña? ¡Es colirio, no tequila!
13. ¿Por qué cuando cogemos una caja de medicamentos, por muchas vueltas que le demos, siempre la abrimos por el lado que no es y aparece el prospecto, ahí, doblado?
Mikel